Publicado: diciembre 11, 2024
La violencia ligada a los préstamos ilegales conocidos como “gota a gota” ha cobrado nuevas víctimas. Este martes, cerca de la medianoche, un ataque armado terminó con la vida de Jamshid de Jesús Rahimi Santamaría, conocido como Mustafá, y de Fabián Alberto Serrano Aguilar. Ambos fallecieron en las afueras de una gasolinera en San Juan de Tibás, después de haber asistido al partido en el que Saprissa venció a San Carlos en su estadio.
Rahimi, de 34 años, era un prestamista destacado en Pavas, San José, y se presume que su actividad financiera estuvo en el centro de las disputas que desencadenaron su muerte. La víctima recibió múltiples disparos en el abdomen, espalda y brazos, mientras que Serrano, de 41 años, fue alcanzado por dos impactos mortales cuando intentaba proteger a una mujer que los acompañaba.
Los préstamos gota a gota y su impacto violento
Este tipo de préstamos, caracterizados por la rapidez de su otorgamiento y los altos intereses que exigen, han crecido en Costa Rica como una alternativa para personas que no califican en el sistema bancario tradicional. Sin embargo, estas prácticas están marcadas por extorsiones, amenazas y, en casos extremos, violencia mortal. Solo en 2023, la Policía Judicial atendió más de 830 denuncias de extorsión relacionadas con este sistema ilegal.
De acuerdo con la Oficina del Consumidor Financiero, alrededor de 221.000 costarricenses han recurrido a estos créditos informales, muchas veces sin considerar las graves consecuencias que pueden acarrear. En Pavas, este fenómeno se ha convertido en el eje de disputas entre grupos que buscan controlar el mercado, generando amenazas de muerte y ataques entre bandas rivales.
Conexiones con hechos previos
El asesinato de Rahimi parece estar vinculado a otro ataque armado ocurrido semanas antes frente a un restaurante en La Sabana, donde resultaron heridos un prestamista conocido como Cucho y su guardaespaldas, un exfuncionario de seguridad presidencial. Ambos eventos reflejan la creciente violencia en torno al negocio de los préstamos gota a gota, que muchas veces es utilizado para lavar dinero procedente del narcotráfico y otros delitos.
Según las autoridades, Rahimi acumulaba un historial delictivo que incluía 20 reportes policiales y varias detenciones relacionadas con drogas, armas y robo. Además, se le vinculaba con grupos como “Los Gemelos” y la banda de Erwin Guido, alias El Gringo, asesinado en 2017.
Una víctima colateral
El fallecimiento de Serrano, considerado una víctima colateral del ataque, conmocionó a los presentes en el lugar. Su intento por proteger a la mujer que los acompañaba resalta la crudeza del acto, que ocurrió en plena vía pública, frente a un conocido restaurante de comida rápida en Tibás.
¿Qué dicen las autoridades?
Aunque el Deportivo Saprissa declinó emitir comentarios sobre el caso, se sabe que Rahimi tenía antecedentes de violencia en partidos de fútbol, lo que llevó a su veto indefinido en el estadio en 2013. Sin embargo, aún se desconoce si esa restricción fue levantada posteriormente.